La comunidad del municipio de Cogua, Cundinamarca, denunció que teme que la explotación minera a gran escala propuesta en una licitación ambiental ponga en peligro la integridad de un río local.
Los ciudadanos de Cogua están alarmados y han decidido denunciar la preocupante situación que podría afectar a uno de los ríos más importantes de Cundinamarca.
Temen que se comprometa el suministro de agua en el departamento. Si se realiza esta explotación, se generarían cráteres de más de 8 metros de profundidad a ambos lados del río Neusa, uno de los principales proveedores de agua en la región.
Afectación a río Neusa en Cogua, Cundinamarca
El ingeniero forestal Mario Cubillos destaca que esta intervención minera se llevaría a cabo en una extensión de más de 179 hectáreas sobre el río Neusa.
La solicitud de licencia ambiental se refiere al título minero EIJ-151, que busca la explotación de gravilla y arcilla en la zona.
Según el experto, esto tendría consecuencias negativas para la cuenca y para los más de 90 mil visitantes que acuden anualmente al lugar.
La explotación minera en el río Neusa podría desencadenar una serie de problemas ambientales y socioeconómicos.
En primer lugar, la formación de cráteres de gran profundidad alteraría significativamente el paisaje natural y afectaría el equilibrio ecológico de la zona.
Impacto directo en la flora y fauna local
Esto tendría un impacto directo en la flora y fauna local, poniendo en peligro la diversidad biológica de la región.
Además, la explotación de gravilla y arcilla supondría una extracción masiva de recursos naturales, lo que podría agotar rápidamente las reservas existentes.
Esto afectaría tanto al ecosistema como a las comunidades locales que dependen del río para su subsistencia.
Los pescadores, agricultores y otros habitantes que obtienen su sustento de las actividades relacionadas con el río se verían gravemente afectados.
Por otro lado, el río Neusa es un atractivo turístico importante en la zona. Cada año, miles de personas visitan la cuenca para disfrutar de su belleza natural y participar en diversas actividades recreativas.
Consecuencias de la explotación minera
Si el río sufre las consecuencias de la explotación minera, se vería comprometida la oferta turística y se afectaría la economía local.
La disminución en el flujo de visitantes tendría un impacto negativo en los ingresos de las comunidades y en el desarrollo del turismo sostenible en la región.
Ante esta situación, los ciudadanos de Cogua han decidido actuar y denunciar públicamente la amenaza que representa la explotación minera en el río Neusa.
Han solicitado a la Corporación Autónoma Regional (CAR) que intervenga y llegue a un acuerdo para proteger el río y su entorno.
Es fundamental que se realicen evaluaciones ambientales exhaustivas y se consideren los impactos a largo plazo antes de autorizar cualquier proyecto de este tipo.
Papel fundamental en la región
El río Neusa desempeña un papel fundamental en la región, ya que no solo aporta al río Bogotá, sino que también beneficia unas 300 familias que dependen del cultivo de fresas. Este río mantiene vivos estos cultivos, proporcionando el agua necesaria para su desarrollo.
Es importante tener en cuenta que esta no es la primera vez que se plantea la posibilidad de una explotación minera similar en la zona.
Los habitantes de Cogua tienen la esperanza de llegar a un acuerdo para evitar los efectos negativos de esta explotación minera.
Entienden que no solo estarían en riesgo las especies y los ecosistemas, sino que también se verían directamente afectados en su producción laboral.
Si se permite la explotación minera, sus medios de subsistencia se verían amenazados, ya que la calidad del agua y la disponibilidad de recursos naturales disminuirían.
Además, el cultivo de fresas es una fuente de ingresos vital para muchas familias en la zona.
La explotación minera podría contaminar el agua y afectar la calidad del suelo, lo que tendría un impacto directo en la producción de fresas.
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Reducción en ingresos de las familias
Esto llevaría a una disminución en los rendimientos de los cultivos y, como consecuencia, a una reducción en los ingresos de las familias que dependen de esta actividad.
La comunidad de Cogua busca proteger no solo su fuente de agua y sus medios de vida, sino también su patrimonio natural y cultural.
El río Neusa es parte integral de su identidad como pueblo y forma parte de su historia y tradiciones.
Es un lugar de recreación, un santuario de vida silvestre y un recurso invaluable que debe ser preservado para las generaciones futuras.
Responsabilidad de las autoridades
La responsabilidad recae tanto en las autoridades locales como en las entidades encargadas de la protección del medio ambiente.
La CAR debe evaluar cuidadosamente los impactos de cualquier proyecto minero propuesto y considerar las preocupaciones y los intereses de la comunidad local.
La participación ciudadana es fundamental para garantizar que se tomen decisiones informadas y se protejan los derechos de las personas y la naturaleza.