La Procuraduría General de la Nación ha solicitado a la Secretaría de Ambiente de Bogotá un informe detallado sobre los controles que están implementando para regular la venta y comercialización de especies de tiburones y rayas en la ciudad. Esta petición se dirige a la secretaria Distrital, Adriana Soto Carreño, tras la incautación de 5,5 kilos de carne de tiburón tollo (Mustelus sp.) en un restaurante de comida del Pacífico en la localidad de Teusaquillo.
Le puede interesar: Saboyá Inaugura Banco Municipal de Agua
El hallazgo fue posible gracias a una denuncia ciudadana, lo que pone de manifiesto la importancia de la colaboración de la comunidad en la protección de especies vulnerables. Este incidente subraya la necesidad de fortalecer las medidas de monitoreo y control en la capital del país para evitar la comercialización ilegal de estas especies marinas.
En su comunicación, la Procuraduría citó la Resolución No. 0766 de 2024 de la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (AUNAP). Esta resolución establece:
- Medidas de ordenación y administración para la reducción de capturas incidentales de tiburones y rayas.
- Directrices para el aprovechamiento sostenible de estas especies en el territorio nacional.
La resolución tiene como objetivo principal proteger la biodiversidad marina, especialmente las especies que están en riesgo debido a la pesca incidental. Por ello, se espera que la Secretaría de Ambiente de Bogotá ponga en marcha acciones efectivas para cumplir con estas normativas.
La Procuraduría enfatiza la importancia de que las autoridades locales se alineen con las políticas nacionales y tomen medidas concretas para la preservación de estas especies. Es crucial que se registren y evalúen las actividades de comercialización de productos marinos en la ciudad, con el fin de prevenir la explotación ilegal y asegurar la sostenibilidad de los recursos marinos.
Este caso también resalta la responsabilidad de los establecimientos comerciales en la verificación de sus proveedores y la procedencia de los productos que ofrecen al público. La venta de carne de tiburón y rayas sin los debidos permisos no solo infringe las leyes ambientales, sino que también pone en peligro la conservación de estas especies.
Le recomendamos leer: Alianza Estratégica entre CAR y WWF Colombia para la Gestión Sostenible de Áreas Protegidas