Con el aumento considerable en la ocupación de los servicios de urgencias debido al pico de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) proyectado para continuar hasta mediados de julio, la telemedicina y la atención domiciliaria emergen como soluciones clave para mitigar esta problemática. Estas modalidades no solo ofrecen una atención oportuna y segura, sino que también ayudan a reducir la sobreocupación en los hospitales y el riesgo de contagio en las salas de espera.
Sobre ocupación en servicios de urgencias por IRA
En el mes de mayo, las cifras de ocupación en servicios de urgencias evidenciaron un incremento en ciudades como Bogotá (260%), Medellín (169%), Cali (251%) y Bucaramanga (135%).
Este aumento ha sido impulsado por el incremento de casos de IRA, exacerbado por la temporada de lluvias y los cambios bruscos de temperatura.
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Ante esta situación, Emermédica recomienda enfáticamente el uso de la telemedicina y los servicios médicos a domicilio como alternativas viables y efectivas.
La telemedicina y la atención domiciliaria no solo permiten acceder rápidamente a los servicios médicos sin necesidad de desplazarse, sino que también ofrecen otras ventajas significativas.
Entre ellas se encuentran:
1. Reducción de Desplazamientos: Los pacientes pueden recibir atención médica sin salir de casa, lo que es especialmente importante durante picos de enfermedades contagiosas.
2. Rapidez en la Atención: La posibilidad de conectarse con un médico en cuestión de minutos a través de llamadas telefónicas o videollamadas.
3. Tecnología de Fácil Uso: Herramientas accesibles que facilitan la interacción con profesionales de la salud.
4. Generación de Historia Clínica y Órdenes Médicas: Incluye la impresión diagnóstica, solicitud de exámenes, interconsultas y emisión de incapacidades médicas si es necesario.
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El Dr. Mauricio Guerrero, Director Médico de Emermédica, enfatiza la importancia de adoptar medidas preventivas para reducir la transmisión de infecciones, sobre todo en entornos de urgencias y pediatría.
Según Guerrero, la transmisión por contacto directo o mediante objetos contaminados agrava la situación en los servicios de salud. “Adoptar una cultura de prevención y autocuidado es esencial,” menciona el Dr. Guerrero.
Además, resalta que la telemedicina es particularmente útil para casos clasificados como Triage IV y V, donde las condiciones médicas no representan un riesgo inmediato.
Estas consultas pueden realizarse ilimitadamente y con la misma confiabilidad que una visita presencial, permitiendo así un uso más racional de los recursos de salud.
El servicio de telemedicina de Emermédica es robusto y ha gestionado más de 260,000 atenciones al año. Ofrece disponibilidad las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y las consultas son atendidas exclusivamente por personal médico calificado.
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En cada sesión se realiza una impresión diagnóstica, se definen tratamientos, se crean historias clínicas y se emiten órdenes para medicamentos y exámenes si es necesario.
Para apoyar la prevención de contagios de IRA, el Dr. Guerrero recomienda adherirse a varias prácticas de higiene y cuidado. Entre las principales recomendaciones se encuentran:
- Lavarse las manos de manera constante.
- Ventilar adecuadamente los espacios cerrados.
- Evitar el contacto con personas infectadas.
- Mantener al día la vacunación contra la influenza.
- Cubrirse la boca y la nariz al toser o estornudar.
- Consumir alimentos ricos en vitaminas A y C.
- Mantenerse bien hidratado.
En caso de contraer una infección respiratoria, se sugiere seguir ciertos cuidados específicos:
- Guardar reposo y permanecer en casa.
- Evitar enviar a los niños enfermos al colegio o jardín.
- Mantener una dieta saludable y una buena hidratación.
- Lavarse las manos frecuentemente.
- Protegerse del frío y el polvo.
- Evitar cambios bruscos de temperatura.
- No fumar ni exponerse al humo.
- No compartir alimentos, bebidas ni artículos personales.
Estas prácticas y el uso de servicios de telemedicina y atención domiciliaria no solo facilitan el acceso a la atención médica, sino que también apoyan la descongestión de los servicios de urgencias, permitiendo una gestión más eficiente de los recursos de salud y reduciendo el riesgo de transmisión de infecciones.