En una iniciativa sin precedentes desde hace más de tres décadas, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) despliega su estructura para llevar a cabo el Censo Económico Urbano en Colombia. Este 2023, el país atestiguará un riguroso análisis de sus negocios urbanos, echando luz no solo en las empresas establecidas, sino también en aquellos esfuerzos comerciales que pulsan en las arterias de sus calles: la economía popular.
Piedad Urdinola, al frente de la entidad, señaló la importancia de actualizar los datos económicos que datan de la época de 1990. Este censo se convierte en una herramienta fundamental para discernir la estructura de ingresos y egresos de las empresas, y por primera vez, se prestará atención a los vendedores ambulantes, brindando así un nuevo matiz al tradicional panorama económico.
Con la finalidad de cubrir la vastedad de los centros urbanos del país, se ha previsto una fuerza de tarea compuesta inicialmente por 3.000 recolectores de campo, cifra que se elevará a 11.000 una vez se incorporen 8.000 adicionales en la segunda mitad del año.
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El proyecto, cuyo presupuesto asciende a los $240.000 millones, promete revelar resultados preliminares en diciembre, para luego proporcionar un informe detallado el año entrante. Mientras tanto, Urdinola también compartió insights sobre el descenso observable en la tasa de nacimientos, una tendencia acentuada post-pandemia que se proyecta tener efectos considerables en el envejecimiento poblacional y la dinámica de la fuerza laboral del país.
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