A los 91 años, dejó de existir en Mónaco este 15 se septiembre. Enfrentaba una dolencia recientemente atendida por especialistas al norte de Italia.
Fernando Botero había nacido en Medellín el 19 de abril de 1932; era considerado como uno de los artistas más destacados en la historia del arte colombiano.
Su estilo distintivo, caracterizado por la representación de personajes con volúmenes exagerados, conquistó la admiración de los amantes del arte e, incluso, de quienes no estaban muy familiarizados con la pintura y la escultura.
Sus obras alcanzaron precios astronómicos en subastas; algunas de ellas superaron los 2 millones de dólares. Sus cuadros, destacados por personajes de grandes volúmenes, se exhiben en los museos más importantes y sus esculturas en calles y plazas de grandes capitales como incluidas Madrid, París, Londres y Roma.
Un artista diferente
Su estilo distintivo, caracterizado por la representación de personajes con volúmenes exagerados, conquistó el corazón de espectadores de todo el mundo. Sus obras alcanzaron valores astronómicos en subastas, cotizándose alguno en 2 millones de dólares.
Botero logró llevar el arte colombiano a los lugares más destacados del panorama internacional. Sus cuadros y esculturas decoran los rincones más icónicos de importantes ciudades como Madrid, París, Londres y Roma. Su influencia en la escena artística es incuestionable, y su legado perdurará en el tiempo.
El camino artístico de Botero comenzó en la Medellín del siglo XX, una época en la cual los vitrales de las iglesias superaban en número a los museos. Su infancia y adolescencia estuvieron marcadas por una pasión temprana por el arte. Esa disposición lo llevó a escribir sobre Picasso y a crear dibujos que, aunque elogiados por algunos, le valieron la expulsión de la secundaria.
Sus ilustraciones comenzaron a publicarse en el periódico El Colombiano, financiando así su educación y sus primeros viajes a Europa y Estados Unidos.
Botero, la diferencia
A lo largo de su carrera, el artista paisa desafió las corrientes artísticas de su tiempo y desarrolló un estilo único que fusionó elementos vanguardistas con lo figurativo. Su innovación cromática y su audacia para reinterpretar obras clásicas, como su versión voluminosa de la Mona Lisa, lo convirtieron en un referente de la escena artística.
A pesar de las críticas y controversias que rodearon su obra en diferentes etapas de su carrera, Fernando Botero logró consolidarse como un icono cultural tanto en Colombia como en el mundo entero. Su contribución al arte y su legado perdurarán en el tiempo, al igual que su impacto en la cultura de su país.
Por todo lo anterior el planeta entero lamentó su partida a la eternidad. En Europa, Asia, África, norte centro u sur América hicieron sentir su pesar por el deceso del artista.
*Noticia en desarrollo...