La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha decidido detener de manera inmediata la extracción de materiales en una cantera ubicada en una zona de especial relevancia ambiental en Pacho, Cundinamarca. Este predio, situado en la vereda Canadá, forma parte del Distrito Regional de Manejo Integrado (DRMI) Macizo - El Tablazo y del Páramo de Guerrero.
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La acción de suspensión fue impulsada por una solicitud presentada por un colectivo de vigilantes ambientales del municipio de Subachoque. Ante la denuncia, profesionales de la Dirección Regional Rionegro de la CAR realizaron una inspección en el lugar conocido como “San José”, donde se llevaba a cabo la extracción de material de construcción, lo que podría haber ocasionado impactos significativos en los delicados ecosistemas locales y en el recurso suelo.
Durante la inspección, se descubrió que se habían practicado actividades de extracción recientes en una superficie de aproximadamente 136 metros cuadrados del talud del predio. Se presume que el material extraído estaba siendo destinado al mantenimiento de las vías que conectan la vereda Canadá con la vereda El Guamal en Subachoque. Sin embargo, no se logró determinar el destino final del material (recebo) durante la visita técnica.
Alejandro Fiquitiva, el director regional Rionegro CAR, subrayó la importancia de la colaboración de la comunidad en la identificación de actividades ilegales: “Con el aporte de ambientalistas de Subachoque, estamos tomando medidas preventivas contra una cantera que realiza explotación ilegal del suelo. Instamos a la comunidad a que nos informe sobre este tipo de situaciones”, enfatizó.
Aunque las actividades mineras en cuestión estaban relacionadas con el mantenimiento vial, deben contar con la autorización pertinente de las autoridades ambientales debido a los posibles efectos adversos sobre los ecosistemas, especialmente en áreas tan frágiles como los páramos. La observación de intervenciones a lo largo del camino que comunica las veredas Canadá y El Guamal, refuerza la necesidad de regulaciones estrictas.
Esta decisión se enmarca dentro del compromiso de la autoridad ambiental de proteger y conservar los recursos naturales de la región, cumpliendo con las normativas ambientales vigentes. La CAR destaca su responsabilidad de garantizar la sostenibilidad de estos recursos en beneficio del entorno y de las comunidades locales.
La entidad ha reiterado que cualquier actividad que ponga en riesgo la integridad ambiental será sancionada conforme a lo estipulado por la ley. En este sentido, hace un llamado a comunidades y empresas para que se apeguen a las regulaciones establecidas respecto al uso de recursos naturales, subrayando la importancia del cumplimiento normativo para la preservación ecológica.
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