Duros aguaceros acabaron con los incendios forestales que mantenían en tensión buena parte del centro de Cundinamarca, especialmente en Nemocón, Suesca, Tausa, parte de Zipaquirá y La Calera.
Intensas precipitación cayeron este sábado en buena parte de la Sabana Centro y sectores de Bogotá, acabando con las emergencias desatadas por el fuego que destruyó enclaves ecológicos en varios municipios.
Las primeras informaciones en video distribuidas a través de las redes sociales muestran imágenes inusuales por estos días: personas usando paraguas.
Esos mismos mensajes indican que las precipitaciones cayeron en Nemocón, Suesca, Tausa, hacia la montaña en zona de Guatavita y La Calera e, incluso, en algunos sectores de Bogotá.
Otra nota, igual a través de whatsapp, da cuenta de precipitaciones fuertes en zonas del “Peaje de Casablanca y Tierra Negra” sobre la vía Zipaquirá – Ubaté.
Aguaceros inesperados
Los sucedido, realmente providencial, “milagroso” para los más creyentes, es atribuido a las llamadas “rogativas” y súplicas elevadas el Creador y a San Isidro Labrador, patrono de los cultivadores. Comunidades católicas suelen elevarle ruegos en temporadas difíciles como la actual.
En Nemocón, hoy, la imagen del Santo fue expuesta en diferentes puntos hasta donde llegaron creyentes para rogarle que “hiciera llover”. En medios de esas sesiones, de un momento a otro, el cielo de oscureció y, tras ellos, cayeron gruesas goteras de agua.
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Las gentes salieron a las calles, algunas de ellas con paraguas, para dirigirse hasta donde se hallaba la imagen de San Judas Tadeo. La emergencia desatada por los incendios forestales, algunas de ellas provocadas por manos criminales, quedaban como un doloroso episodio que dejó desolación en vastas zonas del centro de Cundinamarca.
En algunos sectores, como en Nemocón, las precipitaciones fueron tan severas que solo permitían ver a unos pocos metros de distancia. Milagro o no, lo cierto es que este sábado 27 de enero cayeron fuertes aguaceros en zonas montañosas cuyos bosques fueron arrasados por devastadores incendios forestales.
La evaluación de las lluvias la tarde de este sábado en Bogotá y Cundinamarca, finalizando tarde, aún se encontraba en proceso a manos de las autoridades.
¿Incendios forestales provocados?
Las causas de varias las conflagraciones en Zipaquirá, Nemocón, Suesca, La Calera, Sopó y otras poblaciones de la Sabana Centro pudieron obedecer a circunstancias diferentes a fenómenos naturales. Incluso se habla de accidentes aún no confirmados.
Precisamente, el Gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, informó que al menos 11 emergencias pudieron ser activadas por pirómanos, uno de los cuales ya se encuentran en manos de las autoridades. Otros cuatro, en Zipaquirá, están siendo perseguidos.
Las investigaciones se encuentran en marcha y los resultados de las mismas pueden ser entregados de un momento a otro por las autoridades. El pronunciamiento del gobernador Jorge Rey sobre el particular, se conoció en Fusagasugá a propósito de los Diálogos Comunitarios convocados para implementar el Plan de Desarrollo de Cundinamarca en sesión de este viernes (26 de enero).
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Dijo que la posible presencia de manos criminales en los incendios forestales son materia de averiguaciones a manos de grupos investigativos especiales de la Policía. El Ejército también cumple esa tarea.
Uno de los incidentes reportados fue denunciado por el alcalde de Zipaquirá, Fabián Rojas, quien afirmó que un grupo de cuatro personas provocó un foco de llamas en el sector de San Benito. La Defensa Civil respondió rápidamente a la emergencia, controlando las llamas antes de que se salieran de control.
En otro incidente reciente, el jueves 25 de enero, las autoridades lograron la detención de un individuo señalado como presunto autor de un incendio forestal en la jurisdicción de Cambao. La emergencia ocurrió en el corregimiento de San Juan de Rioseco. Poco después del incidente, la Policía Nacional capturó al individuo en flagrancia, portando combustible y un mechero, mientras intentaba iniciar otro fuego en la misma zona.
Otros incendios forestales fueron atendidos en Bogotá, Nemocón, Soacha, Zipaquirá, Suesca y otras áreas de las sabanas Centro y Occidente. Algo similar se presentó en Pasca, la vereda La Cajita, y entre Venecia y Pandi también han sido atendidos por las autoridades.
En Fusagasugá, se registraron incendios en las Veredas del Sur, Chinauta y las instalaciones del centro de reciclaje de Emserfusa sobre la variante, los cuales fueron controlados a tiempo.
Soacha y Sibaté, por su parte, reportaron problemas forestales en el Humedal Tibanica y la Hacienda Tequendama, así como en el Humedal Santa Ana y en Ciudad Verde. El alcalde de Soacha, Julián Sánchez, declaró la Alerta Roja ante la complejidad de la situación.
Informes de Bomberos Cundinamarca indican que, pese a lo anterior, aún persisten focos de incendios forestales algunos puntos de Zipaquirá y Sopó.