La escasez de precipitaciones en Colombia ha desencadenado una serie de alertas en todo el país, revelando un panorama preocupante para los recursos hídricos. El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) ha emitido un pronóstico alarmante sobre la situación del embalse de Chuza, parte del sistema Chingaza, que podría alcanzar niveles críticos hacia finales de año.
Ghisliane Echeverry, directora del IDEAM, ha compartido información crucial sobre las condiciones climáticas actuales y futuras del país. Según sus declaraciones, Colombia está experimentando una marcada disparidad en sus patrones climáticos:
- Región Caribe: Afectada por vendavales y tormentas tropicales.
- Suroriente del país: Atraviesa un extenso período de sequía.
Las proyecciones para los próximos meses indican que las regiones de la Amazonía y la Orinoquía continuarán enfrentando un déficit de precipitaciones. Aunque se esperan algunas lluvias esporádicas, el total de precipitaciones se mantendrá por debajo de los niveles normales hasta abril de 2025.
En contraste, las regiones Caribe, Andina y Pacífica han comenzado a registrar algunas lluvias. Se prevé que la segunda temporada de lluvias se consolide entre octubre y noviembre, coincidiendo con la temporada de ciclones tropicales en el Caribe colombiano.
El fenómeno de La Niña, que históricamente ha afectado principalmente a las regiones Pacífica, Caribe y Andina, tiene una probabilidad del 71% de consolidarse en los próximos meses. Este fenómeno podría generar un aumento en las precipitaciones en estas tres regiones.
Le puede interesar: Embajador de EE.UU, Francisco Palmieri Advierte sobre Amenazas al Presidente Petro y Refuerza Relaciones Diplomáticas con Colombia
La situación de los embalses en Colombia varía según su ubicación geográfica:
- Embalses en Santander, Boyacá, Caldas y Antioquia: Mayor probabilidad de lluvias en los próximos días.
- Embalses en Valle del Cauca, Cauca y Córdoba: Posibles lluvias de intensidad variable.
- Embalses en Cundinamarca: Baja probabilidad de lluvias, especialmente en el embalse de Chuza.
El caso del embalse de Chuza, crucial para el suministro de agua de Bogotá, es particularmente preocupante. Las predicciones indican que su nivel podría descender hasta el 22% de su capacidad para diciembre, lo que plantea serios desafíos para la gestión del recurso hídrico en la capital colombiana.
Esta situación pone de manifiesto la necesidad de implementar estrategias de conservación y uso eficiente del agua en todo el país.
Le recomandamos leer: Alcaldía de Chía: Toque de queda comienza este domingo 22 de septiembre
