Con el sol araucano como testigo, el presidente Gustavo Petro, en compañía de las ministras de Agricultura, Jhenifer Mojica, y de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, se presentó en Arauquita, Arauca, para dar un impulso crucial a la estrategia de industrialización solidaria. Este proyecto visionario busca empoderar a los productores de cacao de la región, quienes son vistos como el motor de esta iniciativa liderada por la Unidad Solidaria.
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La estrategia, que apunta a transformar a los cacaoteros de Arauca en propietarios de su propia cadena de industrialización, propone un modelo cooperativo para ir más allá de la simple comercialización de cacao. En un gesto de fuerte apoyo, el Gobierno está invirtiendo $15.000 millones para establecer siete centros de acopio, fermentación y secado del cacao, elementos cruciales para la calidad del producto final.
Durante su intervención, el presidente Petro delineó tres modelos posibles para el futuro de la producción cacaotera: uno centrado en el capitalismo tradicional, otro dominado completamente por el Estado, y un tercero, favorecido por el presidente, donde los propios campesinos serían dueños de las fábricas a través de una asociación. "Para industrializar, es necesario asociarse, pero en lugar de que sea un gran capitalista o el Estado el dueño, deberían ser ustedes los propietarios", explicó Petro, subrayando la importancia de una organización robusta entre los productores.
El desafío de financiamiento es central en esta visión, con el Banco Agrario llamado a ofrecer créditos que los campesinos puedan pagar con los ingresos generados, garantizando que, tras saldar la deuda, no serán ni el Estado ni un empresario los dueños, sino los productores en colectivo.
A pesar de reconocer los riesgos inherentes a la estrategia, el mandatario instó al compromiso de todas las partes. Además, anunció planes para el fortalecimiento educativo en la región, incluyendo el Sena y la construcción de la Universidad de Saravena, como parte de un esfuerzo más amplio para llevar conocimiento y habilidades necesarias para el éxito de esta empresa.
En un esfuerzo por conectar Arauca con mercados internacionales, Petro propuso inversiones estatales significativas en infraestructura vial, destacando la construcción de la ruta Libertadores - La Soberanía. Este corredor estratégico pretende facilitar la exportación del cacao conectando la región con puntos neurálgicos comerciales y puertos importantes.
La jornada fue también una oportunidad para escuchar directamente a los productores de cacao, quienes expresaron la urgente necesidad de garantizar la paz y seguridad en Arauca. Frente a esto, el presidente reafirmó su compromiso con la propuesta de diálogos regionales de paz, subrayando que su gobierno buscará la armonía sin alinearse con facciones armadas.
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