En Colombia, las festividades de fin de año, como la Navidad y el Año Nuevo, son sinónimo de reuniones familiares y celebraciones al aire libre, donde los asados y las fogatas juegan un papel central. Sin embargo, desconocer las normas legales que rodean estas prácticas podría llevar a serias consecuencias para los entusiastas de estas tradiciones.
- Le puede interesar: Año Nuevo: Sube número de afectados con pólvora en Cundinamarca
La Ley 1801 de 2016, que regula el Código Nacional de Policía y Convivencia, advierte sobre las actividades que impliquen fuego en espacios públicos, destacando la necesidad de obtener la debida autorización. Aunque la legislación no prohíbe explícitamente los asados en la calle, sí faculta a las autoridades locales para aplicar sanciones en caso de que se ponga en riesgo la seguridad pública o el medio ambiente.
Existen ciertos aspectos que los ciudadanos deben considerar:
- Las actividades con fuego sin las medidas de seguridad pertinentes pueden acarrear multas significativas. Estas sanciones económicas van desde 32 salarios mínimos diarios legales vigentes, equivalentes a cerca de $786,898, hasta cifras superiores, dependiendo de la severidad del incidente.
- Además, el marco legal colombiano contempla penas más severas para actos negligentes. Según el artículo 350 del Código Penal, iniciar incendios que amenacen la seguridad de personas o propiedades puede resultar en penas de prisión que oscilan entre uno y ocho años.
Es esencial que quienes planean celebraciones con asados tomen en cuenta estas regulaciones, ya que las sanciones no solo afectan a las actividades de asado, sino también a cualquier otra que implique el uso de fuego en áreas públicas.
Esta información resalta la importancia de combinar las tradiciones con un enfoque consciente y responsable que respete las leyes vigentes. Así, los ciudadanos pueden disfrutar de sus celebraciones sin contratiempos legales y contribuir al bienestar de la comunidad.
- Le recomendamos leer: Atraco en Chía: Investigan posible vínculo familiar con uno de los ladrones