*Desaparición, Ángela Chisacá en Girardot, Cundinamarca. Un año, 4 meses y 20 días de trabajo del Gaula y la Fiscalía fueron necesarios para dar con el paradero y detención de los posibles responsables de la desaparición de la joven empresaria del comercio en esa ciudad.
La aprehensión de los presuntos responsables del posible secuestro de Ángela María Chizacá Bogotá se produjo en operativo especial adelantado las últimas horas en zona rural de Flandes, Tolima. Otro reporte oficial dice que esta acción de las autoridades se cumplió en el municipio de San Luis en ese mismo departamento.
Alias “El Gordo” y otros dos integrantes de la banda “Los Inquisidores” se hallaban en una vivienda de la vereda Camalá cuando fueron sorprendidos y capturados por unidades especiales de las autoridades.
Los trabajos investigativos y diferentes pesquisas le permitieron al Gaula establecer el lugar en donde los hampones solían permanecer la mayor parte de su tiempo. Guardaban una actitud discreta con la intención de eludir la persecución de los uniformados.
Desaparición y secuestro de Ángela Chisacá
Fue el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, quien entregó los primeros reportes sobre las detenciones en referencia. “Se ha logrado la captura de los responsables del secuestro y desaparición forzada de Ángela María Chisacá, comerciante del municipio de Girardot, hechos ocurridos en el año 2023”.
También confirmó que “El Gordo” y sus compinches hacen parte del combo delictivo conocido en el bajo mundo como “Los Inquisidores”. El primero de ellos, además, hizo parte de las autodefensas del Tolima por el año 2005 y presenta antecedentes por “tráfico de estupefacientes, violencia contra servidor público y daño en bien ajeno”.
Ángela María Chisacá fue abordada la noche del miércoles 12 de julio del año pasado cuando llegaba a su residencia luego de cumplir sus tareas como empresaria en el negocio de pizzas.
Según la vigilancia del lugar en ese momento, la víctima, minutos después de su ingreso, volvió a salir acompañada de otras personas dentro de su vehículo. Desde entonces nada se volvió a saber de ellos. Su automotor fue encontrado incinerado poco después.
Semanas después se conoció que un grupo desconocido se había comunicado con la familia de la joven madre para exigir el pago de $5 mil millones. Aún hoy, nada se sabe de ella.
Las investigaciones
El trabajo de seguimiento y esclarecimiento de la desaparición de la joven madre comenzó poco después de tenerse certeza de su, entonces, misteriosa desaparición.
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Las primeras tareas consistieron en el análisis de los técnicamente llamados CCTV (circuito cerrado de televisión), elementos ubicados en el lugar de los hechos al igual que en las vías aledañas. Mediante una evaluación del material (550 horas de evaluación), le permitió a los sabuesos alcanzar las primeras pistas de los hoy detenidos.
Esas mismas evaluaciones permitió establecer técnicamente la ruta empleada por los delincuentes para realizar el secuestro. También lograron recibir “información por parte de la ciudadanía que ayudó al desarrollo de la investigación”.
Unas 20 personas, todos ellos potenciales testigos, fueron entrevistados, procedimientos que resultaron “definitivos” a la hora de identificar a los sospechosos.
Con esos primeros registros se documentó una petición para alcanzar autorizaciones que habilitara la realización de 6 allanamientos. También se cumplieron 35 registros voluntarios.
Pistas sólidas
Las tareas desarrolladas por las unidades del Gaula permitió acopiar suficiente material probatorio y evidencia física que, hoy, fue aportada a la Fiscalía. Esas mismas pistas sustentaron una solicitud al Juez de Control de Garantías sobre la expedición estas órdenes de captura por los delitos de: desaparición forzada, secuestro extorsivo, incendio y concierto para delinquir.
Acto seguido, fue organizada la operación de registro y allanamiento efectuada las últimas horas en una vivienda rural de del municipio de San Luis, Tolima. Otras fuentes habían indicado que esta escena se había cumplido en Flandes. De cualquier manera, esta incursión de las autoridades facilitó la detención de tres personas y la incautación de igual número de armas de fuego y el decomiso de 6 celulares.
Los otros dos capturados le ayudaron a perfilar la víctima a alias “El Gordo”. Todos estos delincuentes y elementados incautados fueron dejados a disposición de la autoridad judicial competente.
Este episodio permitió que las autoridades lanzaran llamados a las comunidades a fin de que reportes hechos ilegales de cualquier tipo. Para ello tienen dispuesta la línea de emergencia 123.
