En una operación conjunta dentro del Plan Ayacucho Plus, el Ejército Nacional, la Policía y la Corporación Autónoma Regional (CAR) asestaron un duro golpe a la minería ilegal en el departamento de Cundinamarca.

La operación se desarrolló en el marco del Plan Ayacucho Plus y contó con la participación activa de la Brigada contra la Explotación Ilícita de Yacimientos Mineros y el Grupo de Caballería Mecanizado N.º 10 Tequendama, adscrito a la Décima Tercera Brigada. Esta coordinación permitió que las autoridades desplegaran una estrategia focalizada en desmantelar la estructura económica de la minería ilegal.
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Durante la intervención realizada en la vereda Faracia del municipio de Lenguazaque, se alcanzaron resultados relevantes, entre ellos la incautación de diversos equipos esenciales para la explotación indebida de carbón. Entre los equipos mencionados se encuentran:
• Malacate
• Compresor
• Cargador
• Motosierra
Ejército Policía y CAR minería ilegal y capturan a tres personas

Estos instrumentos se utilizan en la extracción de aproximadamente 6.400 toneladas de carbón mensuales, valoradas en cerca de 500 millones de pesos, lo que evidencia la magnitud económica de estas actividades ilegales.
Tres personas fueron detenidas en el lugar durante la diligencia judicial, quedando a disposición de las autoridades para el proceso correspondiente. Esta interceptación se realizó en un contexto en el que se monitorea el aprovechamiento ilícito de recursos naturales renovables en la región.
La operación también impactó infraestructura valorada en 480 millones de pesos, la cual forma parte integral del mecanismo de financiación de las actividades ilegales. Las actuaciones ejecutadas han repercutido en la estructura financiera de los grupos en investigación.
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El control ambiental fue otro de los ejes del operativo, ya que se buscó mitigar problemas de deforestación y contaminación que afectan el agua, aire y suelo. Este impacto ambiental se estima podría tardar hasta 40 años en revertirse en caso de continuar las actividades no reguladas.

Esta intervención integrada resalta la implementación de medidas que buscan no solo el control de actividades delictivas, sino también la protección de los ecosistemas afectados. Asimismo, evidencia la coordinación interinstitucional como herramienta fundamental en la lucha contra este tipo de delitos.
Las tropas de la Décima Tercera Brigada, unidad orgánica de la Quinta División del Ejército Nacional, ratifican su compromiso con la seguridad y el bienestar del centro del país, trabajando de la mano con la Policía Nacional y la CAR para erradicar prácticas ilegales que afectan la economía, el medio ambiente y la tranquilidad de la población.
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Las autoridades continúan con las investigaciones para identificar a los responsables de financiar estas actividades ilícitas y reforzar las estrategias de control ambiental en la región.