En un giro inesperado, Emilio Tapia, el conocido excontratista, ha declinado la petición de traslado a una guarnición militar en Malambo, Atlántico, que había sido promovida por su pareja. Este desenlace pone fin al proceso judicial que estaba en curso y elude las sanciones que pendían sobre dos miembros del Ejército Colombiano.
El juez primero promiscuo municipal de Malambo dio por terminado el incidente de desacato contra el Batallón de Ingenieros Francisco Vergara y Velasco, acatando el desistimiento presentado por la familia y el propio Tapia. Este hecho evita la ejecución de sanciones disciplinarias hacia un general y un teniente del batallón, quienes enfrentaban repercusiones por la no ejecución del traslado previamente ordenado.
Le puede interesar: Enel Colombia brinda recomendaciones para prevenir accidentes por riesgo eléctrico
La permanencia de Emilio Tapia se mantendrá en la Penitenciaría El Bosque, su actual sitio de reclusión. En este establecimiento, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) tiene el deber de asegurar las condiciones adecuadas de seguridad y habitabilidad para el prisionero, como reitera el juez en la comunicación dirigida al Consejo Seccional de la Judicatura en el Atlántico.
La decisión, registrada en las últimas horas, marca un hito en un caso que había suscitado interés público por el traslado de Tapia y la implicación de altos rangos militares en el posible incumplimiento de una orden judicial. Con la conclusión de este capítulo, la atención se centra ahora en la gestión del INPEC para cumplir con las exigencias judiciales en materia de condiciones de detención.
Le recomendamos leer: Fusagasugá: Durante la noche de velitas el Cuerpo de Bomberos atendió dos incendios