La Catedral de Sal de Zipaquirá, conocida por ser la primera maravilla de Colombia, se prepara para reunir a una multitud de visitantes en esta temporada navideña. A partir del 29 de noviembre y hasta el 12 de enero, este emblemático destino se transforma en un espectáculo deslumbrante con la iluminación de más de 600.000 bombillas LED y un majestuoso árbol navideño de 14 metros, creando un ambiente que fusiona arte, espiritualidad y tradición de una manera singular.
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Situada a aproximadamente dos horas de la capital, Bogotá, y construida a 180 metros de profundidad dentro de una mina de sal, la Catedral representa un pilar cultural, religioso y ecológico de Colombia. Cada temporada navideña, el lugar se engalana con un impresionante festival de luces que encanta tanto a turistas nacionales como internacionales, convirtiendo sus túneles en un caleidoscopio de colores y formas que capturan la esencia mágica de estas festividades.
El inicio de este evento, resaltado por la gerente Yenny Páez, subraya el simbolismo de iluminación como un faro de esperanza y solidaridad. Según Páez, se trata de un homenaje a las tradiciones y la maravillosa experiencia de compartir momentos memorables en un entorno tan significativo. La inauguración contó con un ambiente festivo, gracias a las actuaciones en vivo de Los 50 de Joselito y Los Tupamaros.
El acceso al alumbrado se permite entre las 6:00 p.m. y las 9:00 p.m. Los precios de las entradas varían: $57.000 para adultos mayores colombianos, $54.000 para niños colombianos y personas con discapacidad, mientras que los turistas internacionales abonan $97.000, independientemente de la categoría.
Este evento es promovido como una experiencia única, ideal para disfrutar en compañía de seres queridos, y promete ser un encuentro inolvidable durante esta temporada llena de unión y alegría.
Los visitantes tienen la oportunidad de explorar no solo la belleza del alumbrado, sino también la rica historia y la arquitectura subterránea de la Catedral, lo que añade un valor cultural significativo a la visita.
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