En las últimas horas, se ha visto una notable reducción en la cantidad de incendios forestales activos en Colombia, pasando de 32 a 26 gracias al arduo trabajo de los cuerpos de bomberos y otras entidades de emergencia. Esta disminución es resultado de intensas labores de control por parte de brigadas forestales y otras entidades involucradas en la mitigación de incendios.
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El departamento de Tolima ha sido el más afectado, presentando 11 incendios en municipios como Cunday, Melgar, San Luis, Ortega, Anzoátegui, Ataco, Río Blanco, Natagaima y Coyaima. En segunda posición se encuentra el Cauca, con 8 focos de incendios activos en localidades como Toribío, Morales, Totoró, Mercaderes, Bolívar, La Vega, Rosas y Puracé.
Nariño reporta tres incendios en los municipios de Túquerres, San Lorenzo y La Florida; mientras que Cundinamarca, Huila y Valle del Cauca enfrentan un incendio cada uno. En las últimas horas, se ha logrado el control de siete focos adicionales, lo cual ha sido significativo para el descenso en las cifras.
Para combatir estos incendios, se ha utilizado una flota de ocho aeronaves especializadas en extinción. Por tierra, los esfuerzos han sido apoyados por 176 unidades de bomberos, 87 miembros de la Brigada de Apoyo en Desastres, 29 unidades de la Policía Nacional, 18 voluntarios de la Cruz Roja y 76 efectivos de la Defensa Civil. Estos equipos han trabajado incansablemente para contener las llamas y proteger las áreas afectadas.
Las autoridades ambientales han vuelto a hacer un llamado a la población para evitar comportamientos que puedan provocar nuevos incendios. Las condiciones secas y los fuertes vientos han complicado las labores de extinción, convirtiéndose en un desafío constante para los equipos de emergencia.
En resumen, aunque se ha logrado una considerable reducción de incendios activos en el país, Tolima y Cauca siguen siendo las zonas más afectadas. La colaboración entre diversas entidades y el uso de recursos aéreos y terrestres han sido fundamentales para estos resultados.
La reducción de incendios representa un alivio parcial, pero sigue siendo crucial mantenerse alerta y seguir las recomendaciones de las autoridades. Los esfuerzos deben continuar para asegurar que los focos sean controlados y extinguidos de manera definitiva, protegiendo así el medio ambiente y la seguridad de las comunidades.
El trabajo coordinado y las acciones preventivas serán esenciales en los próximos días para evitar que se generen nuevos incendios. Se espera que las condiciones meteorológicas mejoren, facilitando las tareas de control y extinción.
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