La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha delineado una estrategia innovadora centrada en soluciones basadas en la naturaleza, como pilar fundamental para la restauración integral del río Bogotá. Esta iniciativa busca no solo mejorar la calidad del agua, sino también revitalizar los ecosistemas circundantes y ofrecer espacios recreativos a las comunidades locales.
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El plan incluye la creación de humedales artificiales y biofiltros para optimizar la purificación del agua. Además, la revegetalización con especies nativas y el control de especies invasoras conforman una parte esencial de la estrategia para recuperar los ecosistemas asociados al río. Estas medidas se enfocan en restaurar la biodiversidad y la conectividad ecológica, esenciales para un entorno saludable.
Estos proyectos ya han mostrado resultados en la cuenca media y ahora se extenderán a la cuenca alta, cubriendo áreas desde Puente la Virgen en Cota hasta Puente Vargas en Cajicá. La CAR ha priorizado estas zonas para implementar sus actividades, y planea replicar estas prácticas en otras regiones definidas como críticas a lo largo de la cuenca.
Alfred Ballesteros, director general de la CAR, explica que las soluciones basadas en la naturaleza aprovechan los servicios ecosistémicos para enfrentar desafíos como el cambio climático. El uso de estos métodos no solo busca descontaminar el agua, sino también mejorar la ambientación paisajística y crear corredores verdes que protejan la biodiversidad y ofrezcan espacios recreacionales.
En la cuenca media, ejemplos de éxito incluyen la instalación de un parque lineal con especies nativas y un sendero peatonal que permite a los ciudadanos disfrutar y conocer el río. Este enfoque promueve un sentido de pertenencia y responsabilidad hacia el ambiente, incentivando la participación comunitaria en su preservación.
Adicionalmente, la cuenca media ha visto la construcción de áreas multifuncionales que, más allá de prevenir inundaciones, proporcionan hábitats para la fauna y flora nativa, zonas de recreación y biofiltros para mejorar la calidad del agua. Estas áreas también incluirán viveros, centros de compostaje y refugios para aves y mamíferos, consolidando un entorno que favorezca tanto a la biodiversidad como al bienestar humano.
Como parte del megaproyecto de recuperación del río, la CAR ha llevado a cabo obras de adecuación hidráulica en la cuenca media, desde el puente de la Virgen en Cota hasta las compuertas de Alicachín en Soacha. Estas intervenciones, ahora en fase de mantenimiento, han sido cruciales para prevenir emergencias durante las temporadas de lluvias intensas.
La CAR ha anunciado que, aunque no planea nuevas obras hidráulicas de gran escala, sí prevé intervenciones en puntos críticos previamente identificados que presentan altos riesgos de inundación. Estas acciones preventivas son esenciales para proteger a las comunidades asentadas en las cercanías de la cuenca del río Bogotá.
La estrategia de la CAR, al enfocarse en soluciones basadas en la naturaleza, no solo resuelve problemas ambientales inmediatos sino que también promueve una visión de sostenibilidad a largo plazo. Al integrar la biodiversidad y la recreación, se crea un modelo de restauración ecológica que puede servir de ejemplo para otras regiones enfrentando desafíos similares.
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