Un nuevo episodio de inseguridad ilustra la crónica de seguridad de la capital colombiana: un comerciante extranjero se convirtió en blanco de un asalto que casi le cuesta una fortuna. Eran las 6:30 p.m. del pasado lunes 22 de enero cuando el drama tomó escena en el norte de la ciudad, un área que ha suscitado especial atención por su reciente historial de actos delictivos.
El intento de robo estuvo marcado por la sorprendente treta de dos delincuentes disfrazados de policías, quienes con una osadía macabra, se aproximaron al comerciante mientras este se hallaba en su camioneta. Los falsos uniformados, armados y a bordo de una motocicleta con emblemas insinceros de la autoridad, se dispusieron a despojar al hombre de una suma de dinero considerable.
Las secuelas del ataque quedaron evidenciadas en los impactos de bala sobre la camioneta; sin embargo, la respuesta del comerciante fue inesperada y decisiva. En un acto de defensa que rozó la temeridad, la víctima embistió con su vehículo a los asaltantes, causándoles una caída aparatosa que los obligó a dejar en el suelo tanto las bolsas que pretendían sustraer como su motocicleta adulterada.
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La estampida de los agresores se desarrolló en medio de la confusión: mientras uno huía a pie, el otro era recogido por un cómplice en otra motocicleta, dejando tras de sí una escena caótica que fue captada por testigos estupefactos y perturbados por los disparos. A pesar de su fuga, los asaltantes dejaron tras de sí una pista crucial: una montaña de dinero recuperada por las autoridades, ascendente a 150 millones de pesos.
Al examinar en detalle la mecánica del delito, la Policía de Bogotá destacó ciertos elementos inusuales:
- Utilización de uniformes y símbolos de la Policía Nacional y de la ONP (Organización Nacional de la Policía) por parte de los delincuentes.
- Empleo de una motocicleta con placas falsas que correspondían a un modelo Agility, sin relación con la Policía.
- Indicios de una posible banda especializada en suplantar a autoridades para cometer delitos.
- La víctima, un ciudadano extranjero, vigilado y posiblemente seguido desde la entrega de dinero esa misma mañana.
El coronel William Quintero Salazar, portavoz de la Policía, subrayó la importancia de la inmediata respuesta policial y la colaboración ciudadana que permitió la recuperación de parte del botín. Afirmó que las investigaciones continúan, apoyadas en el análisis de las cámaras de seguridad y en la alerta ante posibles ingresos de los delincuentes a centros de salud, dada la probabilidad de que uno resultara herido durante el choque.
En este momento, las autoridades se encuentran trabajando en la identificación y captura de los fugitivos, al tiempo que custodian al comerciante y le proporcionan el soporte necesario para la formalización de denuncias.
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