Cundinamarca celebra un paso significativo en la conservación de los ecosistemas. Bajo la colaboración conjunta de la Gobernación de Cundinamarca, la alcaldía de Bogotá, la Fundación Alianza Biocuenca, y las Juntas de Acción Comunal locales, se ha firmado un acuerdo que marca el comienzo de una nueva era en la gestión hídrica y ambiental de la región. Este pacto es parte de la iniciativa de Pagos por Servicios Ambientales (PSA), cuyo enfoque central es la promoción de la conservación del entorno natural y el manejo responsable del vital líquido.
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El pacto abarca un total de 404,6 hectáreas distribuidas en nueve predios situados en la microcuenca de los ríos Siecha y Chipata, específicamente en el municipio de Guasca. Este acuerdo es el resultado de la colaboración de distintas partes interesadas, incluyendo a Germán Rodríguez Pinzón y Mauricio Alberto Garzón Peña, presidentes de las Juntas de Acción Comunal de Santa Ana y La Floresta II, respectivamente. Estos líderes comunitarios representan a las familias beneficiadas de este esfuerzo conjunto.
Este proyecto estratégico no solo busca proteger y conservar áreas clave para la regulación hídrica, sino también mejorar las condiciones y calidad del recurso hídrico que abastece tanto a zonas rurales como urbanas. Se destaca el enfoque hacia predios estratégicos, conectados con zonas de alta relevancia ecológica como el páramo de Chingaza y el embalse de Tominé, elementos cruciales en el suministro de agua para la región.
La importancia de los Pagos por Servicios Ambientales radica en su capacidad de ofrecer incentivos económicos, ya sea en efectivo o en especie, para motivar prácticas de conservación y restauración de ecosistemas estratégicos. Estos acuerdos voluntarios entre entidades gubernamentales y poseedores de tierras son esenciales para el éxito de estos programas.
Con una inversión cercana a los $230 millones, el acuerdo no sólo proveerá recursos financieros directos a las comunidades implicadas, sino que también impulsará proyectos comunitarios que beneficien el entorno y sus habitantes. Diego Leandro Cárdenas Chala, Secretario del Ambiente de Cundinamarca, enfatizó la importancia de este acuerdo como un modelo de colaboración entre diversos actores para la conservación ambiental y el uso sostenible del agua.
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