Como consecuencia del Paro Camionero y sus eventuales efectos en el suministro de gasolina, al igual que ante la posibilidad de alteraciones de orden público, los Bomberos en Cundinamarca se verán obligados a evaluar los caso a atender.
De lo anterior se supo mediante comunicación de la Delegación Departamental de ese organismo de atención de emergencias, mensaje que remitió a alcaldes y sus comandantes en este territorio.
La nota de tres páginas y en la que referencia puntos de normas sobre su funcionamiento y responsabilidades, el coordinador de Bomberos Cundinamarca, capitán Álvaro Farfán, entregó orientación al respecto.
Solicita, además, que sus efectivos trabajen coordinadamente con las autoridades correspondientes sin desconocer la “situación de alteración de orden público y las problemáticas sociales derivadas de estos bloqueos”.
Paro Camionero y los Bomberos
En mirada de entendidos, se trata de fijar caminos viables que les permita cumplir su misión sin exponer a sus efectivos y las comunidades frente a los peligros de eventos especiales de orden público.
Con ese preámbulo y ante la compleja situación que enfrenta el departamento de Cundinamarca es que adoptaron decisiones especiales.
Dice que debido al paro de transportadores, la Delegación Departamental de Bomberos emitió una serie de directrices encaminadas a salvaguardar la integridad de sus unidades.
Igualmente, advierte sobre una respuesta eficaz ante las emergencias. “Esta iniciativa, fundamentada en el marco legal establecido por la Ley 1575 del 2012 y sus posteriores modificaciones, busca crear un equilibrio entre el deber de servicio y la seguridad del personal bomberil”.
Trabajo conjunto y coordinado
La actual coyuntura ha puesto de manifiesto la necesidad de una colaboración estrecha entre los diferentes actores involucrados en la gestión de crisis. En este sentido, la Delegación formuló llamado a la coordinación entre Cuerpos de Bomberos locales, alcaldías municipales y autoridades competentes en materia de seguridad y orden público
Significa lo anterior que antes de actuar se deben tener los protocolos correspondientes siguiendo pasos específicos:
1-Evaluar de manera precisa los riesgos asociados a cada emergencia.
2-Determinar la viabilidad de la intervención bomberil en zonas de conflicto.
3-Proteger la integridad física de los bomberos y preservar los equipos y vehículos de la institución.
4-Mantener informada a la comunidad sobre las limitaciones operativas en áreas de alto riesgo.
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Además, considera importante destacar que, según las disposiciones legales vigentes, los cuerpos de bomberos no están obligados a poner en peligro a su personal o sus recursos. Lo anterior ante condiciones donde el orden público esté gravemente alterado. “Esta medida no debe interpretarse como una negligencia en el cumplimiento del deber, sino como una estrategia necesaria para garantizar la continuidad del servicio a largo plazo”.
Socialización de las decisiones
Por lo anterior, la Delegación hace énfasis en la importancia de una comunicación clara y constante con la ciudadanía e insta a los cuerpos de bomberos y autoridades locales a hacer públicas sus decisiones.
Recomienda seguir los siguientes pasos: Informar oportunamente sobre las áreas donde el servicio pueda verse comprometido. Explicar las razones de posibles ausencias en determinadas emergencias. Proporcionar alternativas y recomendaciones de seguridad a los habitantes de zonas afectadas.
Ante esta circunstancia y debido a todo lo anterior, algunos cuerpos de Bomberos Voluntarios del departamento, entre ellos los uniformados en Fusagasugá, alertaron sobre los alcances de esta orientación.
Dice que debido al paro nacional de transportadores de carga, la base en esta ciudad se puede ver afectada por la escases de combustible que está afectando buena parte de las comunidades.
En razón a todo ello, “nuestro equipo solo estará atendiendo EMERGENCIAS VITALES. Esto incluye situaciones que representan un riesgo inmediato para la vida o la salud de las personas”.
También dice que, por esa razón, “no se atenderán casos relacionados con alteraciones del orden público ni problemáticas sociales. La vida e integridad física de los bomberos, así como la preservación de sus equipos y vehículos, son prioridades esenciales”.
