Un esfuerzo considerable se lleva a cabo en Cundinamarca para mejorar la calidad del agua del río Bogotá. La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) está cofinanciando múltiples proyectos de plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) en varios municipios que contribuyen con sus vertidos al río.
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En la región de la cuenca alta, se están desarrollando importantes iniciativas. La CAR avanza en los estudios y diseños a nivel de ingeniería para la construcción de las PTAR en Villapinzón y Suesca, además de optimizar la PTAR de Chocontá y contratar los estudios para la PTAR de Sesquilé.
Uno de los proyectos más avanzados es la construcción de la PTAR Pueblo Viejo en Cota, que atenderá a más de 34,000 habitantes del casco urbano del municipio. Hasta el momento, esta obra ha alcanzado un 81% de progreso.
El director general de la CAR, Alfred Ballesteros, señaló que la cofinanciación de estas plantas se enmarca en el cumplimiento de la Sentencia del Río Bogotá. La colaboración con los municipios, encargados de operar estos sistemas, es esencial para el éxito de estas iniciativas.
Otras obras destacadas en la cuenca alta son:
- PTAR Zipaquirá: con un 90% de avance.
- PTAR Sopó: con un 80% de avance.
- PTAR Chía II: completamente finalizada y sirviendo a aproximadamente 169,000 habitantes, cubriendo el 30% del casco urbano del municipio.
En la cuenca baja, la construcción de la PTAR de Anapoima avanza en la inspección de Patio Bonito. Esta planta atenderá a más de 1,300 residentes y ya ha alcanzado un 56% de progreso. Además, la PTAR de El Yulo en Ricaurte, que dará servicio a más de 33,000 personas, se encuentra completamente finalizada y lista para su entrega al municipio.
Para la cuenca media, la PTAR El Salitre destaca como la más grande y moderna del país, tratando el 30% de las aguas residuales de Bogotá y evitando que alrededor de 450 toneladas de residuos sólidos lleguen al río cada mes. Paralelamente, se está construyendo la estación elevadora para la PTAR Canoas, que tratará las aguas residuales del 70% de la capital y el 100% del municipio de Soacha.
Estas acciones subrayan un compromiso significativo con la mejora de la calidad del agua del río Bogotá. Según Ballesteros, "Estas obras nos permiten avanzar hacia las metas de reducción de la carga contaminante y con ello contribuir al saneamiento de nuestro río”.
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