La comunidad emberá de Chocó y Risaralda se prepara para regresar a sus lugares de origen el próximo 8 de septiembre, luego de vivir casi un año en el Parque Nacional de Bogotá. Esta medida llega tras ser desplazados por el conflicto armado que afecta sus regiones.
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Durante su estancia en la ciudad, 844 miembros de la comunidad emberá enfrentaron las duras condiciones climáticas de Bogotá. De este total, 694 personas retornarán a sus territorios el viernes; 130 serán reubicadas en dos albergues dentro de Bogotá, y 20 más recibirán ofertas de integración por parte del distrito.
Isabela Mercado, consejera de paz de la Alcaldía, manifestó que el proceso de retorno marcha según lo previsto. La semana de preparación incluyó jornadas de salud, procesos de bancarización y la firma de actas de voluntariedad. Mañana se dará inicio al regreso, y por primera vez, Bogotá realizará una inversión significativa en estas comunidades para asegurar su retorno seguro.
La Alcaldía de Bogotá y la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas destinaron más de dos mil millones de pesos para apoyar a estas familias en sus territorios. Estas ayudas buscan garantizar la permanencia de las comunidades en sus lugares de origen, mediante transferencias monetarias que aseguren su estabilidad económica durante un año.
El plan de retorno incluye varias etapas. Primero, se realizará el embalaje de las pertenencias que las comunidades tienen en el Parque Nacional. Luego, estas pertenencias serán transportadas en buses hasta sus territorios, con la expectativa de que más de 600 personas hayan retornado a sus hogares la noche del domingo.
Es relevante destacar el esfuerzo conjunto entre las autoridades y las comunidades indígenas para lograr este retorno. La colaboración ha sido vital para asegurar que todas las necesidades básicas y logísticas sean atendidas adecuadamente.
Además de las transferencias monetarias, la preparación incluyó un enfoque integral que abarcó diversos ámbitos esenciales para el bienestar de las comunidades. Las jornadas de salud y los procesos de bancarización son ejemplos claros de cómo se ha trabajado en múltiples frentes.
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