*Es acusado del secuestro de joven madre empresaria en Girardot, Cundinamarca. La víctima aún permanece desaparecida. Fue sacada por la fuerza cuando ya se encontraba dentro del conjunto residencia donde vivía.
El presunto integrante de la banda “Los Camala”, como también denominan en el bajo mundo a ese grupo criminal, alias “El Gordo” había sido detenido el pasado martes 23 de diciembre en zona rural de San Luis, Tolima.
Hoy, él es el principal sospechoso del secuestro y desaparición de la comerciante Ángela María Chisacá Bogotá, de quien nada se volvió a saber desde el miércoles 12 de julio de 2023. Ese día, la empresaria regresaba a su residencia tras cumplir sus tareas como directivo de un grupo de pizzerías en Girardot.
Luego de una sucesión de procedimientos investigativos, expertos en esa clase de crímenes lograron alcanzar indicios creíbles que apuntaban hacia el ya acusado.
Secuestro de empresaria en Girardot
Tras la desaparición de la empresaria, su vehículo fue hallado incinerado en un paraje de la vereda “Camala” de Flandes, Tolima, lo cual le subió temperatura a los rastreos en busca de autores del hecho.
A partir de entonces, los agentes encargados del caso agudizaron sus procedimientos. No cedieron; se mantuvieron firmes sobre las pistas que ya habían logrado hasta cuando alcanzaron el camino correcto hacia los más probables autores del hecho.
Sospechaban que los comprometidos en la desaparición de la empresaria se movían entre Girardot, la vecina Flandes y otras áreas próximas a las orillas del Magdalena. Siguieron husmeando hasta cuando encontraron indicios de que, muy probablemente, podrían estar escondidos en una vereda de San Luis.
A esas alturas, con argumentos sólidos, le pusieron nombre al principal sospechoso: iban tras alias “El Gordo”. Supieron que, muy probablemente, se refugiaba en una finca de la ya citada población. Allí concentraron los trabajos de inteligencia.
Los seguimientos les permitió conocer todos los movimientos y rutina de quienes acompañaban y visitaban el principal sospechoso. Una de las características que, incluso, aumentó la inquietud, consistía en que los moradores de la casa esquivaban los vecinos.
Estrecharon el círculo hasta cuando creyeron que ya era oportuno dar el siguiente paso: la detención del hombre a quien buscaba. Así, tras 1 año, 4 meses y 20 días de trabajo entre el Gaula y la Fiscalía, le dieron captura a uno de los hombres más buscados por esos días en Girardot y poblaciones vecinas.
Avances en el procedimiento
Ya en la actualidad, este viernes 31 de enero (2025), la Fiscalía comunicó oficialmente sobre la decisión del Juez de Conocimiento a quien le correspondió el caso. Ordenó que Edixon Herney, o alias “El Gordo”, debía permanecer “en establecimiento carcelario”.
La misma determinación insiste en que este hombre es presunto responsable del “secuestro y posterior desaparición de la comerciante Ángela María Chisacá Bogotá, quien fue vista por última vez el 12 de julio de 2023”.
Insiste en que el acusado “fue determinante” en los hechos ocurridos en julio del 2023 “cuando la víctima fue retenida por varias personas, entre quienes estaría el ahora procesado”. precisa la información que, entonces, “los hombres llegaron al conjunto residencial de Girardot (Cundinamarca) donde vivía la mujer, a quien sacaron en su propio vehículo, sin rumbo conocido”.
Renglón seguido, indica que al día siguiente el vehículo en el cual se movilizaba la víctima fue encontrado incinerado en la vereda “Camalá” de Flandes, Tolima. Allí mismo fue ubicado el computador portátil y el celular de la víctima.
Más adelante indica que las tareas investigativas permitieron establecer que el 1 de agosto de 2023, la familia de la víctima comenzó a recibir llamadas extorsivas. “Un hombre, quien se identificó como integrante del frente Dagoberto Ramos, de las FARC, le exigió telefónicamente a la madre de Chisacá Bogotá, el pago de $5.000 millones para liberar a la comerciante”. No aclara la información si la suma fue cancelada, pero sí advierte que hoy se desconoce el paradero de la joven madre y empresaria.
El informe precisa que el acusado fue detenido, y que “por petición de la Fiscalía, el Juez del caso impuso al procesado medida de aseguramiento consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario”.
Para el ente investigativo, el procesado pudo incurrir en “los delitos de secuestro extorsivo agravado, incendio y desaparición forzada”, cargos que no aceptó.