Según parece y por el desespero de las agresiones, una de ellas, utilizando arma blanca, se habría causado heridas de consideración en sus brazos
El caso fue puesto al descubierto por la Policía luego de recibir información sobre los presuntos hechos descubiertos por algunos allegados a las niñas.
Conocedores de lo que estaba sucediendo, emprendieron las pesquisas hasta cuando pudieron encontrar pruebas que comprometerían al indiciado.
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Luego, con argumentos suficientes, presentaron el caso a la Fiscalía donde, agentes especializados, avanzaron en las pesquisas.
Detención
Posteriormente y con orden judicial en mano, efectivos del CTI hicieron efectiva la captura del individuo sobre quien la justicia colombiana mantiene serias acusaciones: acceso carnal violento.
Según los investigadores, “el habría accedido brutalmente a sus dos hijas menores de 12 y 14 años. Además y según las denunciantes, los hechos se venían presentando desde hace aproximadamente hace seis años”.
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Todo indica que debido a los suplicios a las que eran sometidas, una de ellas se ocasionó “cortes en los brazos, como forma de rechazo a los presuntos abusos cometidos por su padre”.
Por todo ello, el acusado fue detenido en el barrio Juan Pablo I de Soacha “en cumplimiento de la orden judicial emanada del Juzgado Penal municipal mixto de garantías".
El acusado fue remitido a centro carcelario en Bogotá. Allí, tras las rejas, espera el juicio que decida su responsabilidad frente a los hechos que mantienen conmovida a los vecinos de las víctimas.
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