Una inminente tensión en el transporte público entre Soacha y Bogotá amenaza la movilidad de aproximadamente 90.000 usuarios diarios. Desde el próximo 7 de noviembre, estas personas podrían verse afectadas debido a la no renovación del acuerdo de transporte entre las dos ciudades.
El alcalde de Soacha, Juan Carlos Saldarriaga, expresó su descontento tras la noticia. Aseguró que las repercusiones de este suceso impactarán principalmente a los residentes del municipio de Soacha, quienes se verán limitados en sus desplazamientos hacia la capital.
El burgomaestre recalcó: “Los únicos afectados con esta decisión son los habitantes de Soacha. Aquí hay 90.000 usuarios que se desplazan diariamente entre Soacha y Bogotá en transporte público y Transmilenio no da abasto. Ante ello, es imprescindible que los processos electorales separen su interés de asuntos que benefician a la comunidad."
Le puede interesar: Cundinamarca: Gobierno nacional devuelve proyecto del Regiotram del Norte
La controversia surge también por las objeciones planteadas por el equipo de la alcaldesa Claudia López en las mesas técnicas, respecto al estado obsoleto de la flota de vehículos de transporte. Al respecto, el alcalde Saldarriaga resaltó que las empresas de transporte de Soacha han renovado su parque automotor con vehículos del año 2020 en adelante, mientras que la renovación de la flota de las empresas de operación nacional es competencia del Ministerio de Transporte.
El municipio de Soacha instiste en que ha contribuido con su presupuesto para beneficiar a los residentes de Bogotá. De acuerdo con estas declaraciones, todos los planes de migración y de retorno están cubiertos por los habitantes de la ciudad, siendo financiados con los impuestos recaudados en Soacha para facilitar el tránsito de los habitantes de Bogotá.
En palabras de Saldarriaga, "No deberían existir trabas al servicio de la comunidad. Soacha ha destinado su presupuesto al beneficio de los habitantes de Bogotá. Son nuestros hermanos, pero históricamente los gobernantes de Bogotá han maltratado a los gobiernos municipales de Soacha y, en consecuencia, a su pueblo”.
Es esencial recordar que el convenio actual que permite la circulación de vehículos de transporte público entre ambos lugares expira el 7 de noviembre. Posteriormente, sólo Transmilenio tendrá la autorización para transportar usuarios entre Soacha y Bogotá. Este conflicto de movilidad sigue siendo un tema pendiente a resolver para asegurar el tránsito fluido entre las dos ciudades.
Le recomendamos leer: Petro propone financiar transporte público mediante un aumento en la factura eléctrica