Un joven de 21 años fue asesinado de manera brutal tras recibir un mensaje inesperado de su pareja sentimental, con quien mantenía una relación complicada. Según relata la única sobreviviente del hecho, la mujer le pidió a la víctima que la acompañara a hacer unas compras en la panadería cercana, aprovechando el momento para dialogar. Sin embargo, lo que parecía ser un encuentro normal terminó en tragedia.
El terrible suceso ocurrió en la noche del domingo, cerca de las 7:00 p.m., mientras la pareja caminaba por las inmediaciones de un club polideportivo. Repentinamente, un grupo de individuos armados emergió de un oscuro potrero y los interceptó. Según la versión de la mujer, los asaltantes pretendían robarles sus pertenencias, pero su accionar fue mucho más violento.
Los delincuentes llevaron a la pareja a un lugar apartado y oscuro para evitar ser escuchados. Allí, el joven fue amordazado y posteriormente degollado y apuñalado, mientras la mujer fue víctima de abuso sexual. Una vez consumados los actos de violencia, los agresores abandonaron el cuerpo sin vida y a la mujer en las instalaciones del club deportivo donde los interceptaron inicialmente.
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La policía fue alertada por los vecinos, quienes encontraron a la mujer devastada junto al cuerpo de su pareja. De inmediato, se dio aviso al CTI de la Fiscalía, que procedió al levantamiento del cadáver. Mientras tanto, la mujer fue trasladada al Hospital Mario Gaitán Yanguas, donde se le están practicando los exámenes pertinentes para verificar si efectivamente fue abusada sexualmente.
Sin embargo, esta versión de los hechos genera dudas en los familiares de la víctima. En primer lugar, el único celular que fue robado fue el del joven asesinado, mientras que el de la mujer no fue sustraído. Además, el cuerpo fue hallado en un recinto deportivo de carácter privado, lo que plantea interrogantes sobre cómo los vigilantes permitieron que el cuerpo y la mujer fueran abandonados en ese lugar.
Las autoridades continúan investigando este espeluznante crimen en busca de respuestas y justicia para la víctima. Mientras tanto, la comunidad de Fusagasugá vive consternada ante la brutalidad de este hecho, que deja al descubierto la fragilidad de la seguridad en la zona.
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