La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) está liderando una iniciativa ambiciosa que promete revolucionar el paisaje urbano y ambiental del municipio de Soacha. Este proyecto, que abarca 10.5 kilómetros del río Soacha, no solo busca mitigar problemas de inundación y contaminación, sino que también aspira a crear un nuevo espacio de convivencia entre la naturaleza y la comunidad.
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Estas medidas no solo abordan los desafíos ambientales inmediatos, sino que también sientan las bases para un futuro más sostenible y armonioso para los residentes de Soacha.
La génesis de este proyecto se remonta a una sentencia del Consejo de Estado en 2014, resultado de una acción popular que buscaba proteger el derecho colectivo a un ambiente sano. Esta decisión judicial puso de manifiesto la urgente necesidad de intervenir en el río Soacha, especialmente tras los devastadores efectos de la ola invernal de 2012 que afectó severamente al barrio Llano Grande.
La CAR ha dividido estratégicamente la intervención en tres tramos principales:
1. Desde la desembocadura hasta la carrera 17 con calle 17 sur
2. Desde la carrera 17 con calle 17 hasta la "ladrillera Santafé"
3. El área circundante a la "ladrillera Santafé"
Cada tramo presenta desafíos únicos y requiere soluciones específicas, desde la construcción de jarillones hasta la recuperación de la ronda hídrica y el revestimiento en concreto del canal.
Un aspecto fundamental de este proyecto ha sido el compromiso de la CAR con la transparencia y la participación comunitaria. La entidad ha realizado un extenso trabajo de socialización, que incluye:
- Inventario de 650 predios adyacentes
- Reuniones informativas con propietarios y habitantes
- Recorridos de socialización con autoridades
- Mesas de interacción con colectivos ambientales y entidades diversas
Este enfoque participativo no solo ha permitido a la CAR abordar las preocupaciones de la comunidad, sino también fomentar un sentido de apropiación del proyecto entre los residentes.
La intervención en el río Soacha va más allá de ser una simple obra de infraestructura. Representa un cambio de paradigma en la gestión ambiental urbana, donde la ingeniería se combina con la ecología y la participación ciudadana para crear soluciones integrales. Este proyecto no solo busca prevenir desastres naturales, sino también mejorar la calidad de vida de los habitantes de Soacha.
A medida que el proyecto avanza, con un 60% de ejecución hasta la fecha, la transformación del río Soacha se perfila como un modelo de intervención ambiental urbana. La combinación de medidas de mitigación de riesgos con elementos de urbanismo y paisajismo promete crear un corredor verde que podría convertirse en un nuevo pulmón para el municipio.
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