La Alcaldía, a través de la Secretaría de Gobierno y la Policía, robusteció estrategias dirigidas a contener la embestida del hampa en la ciudad. Nuevos pasos en esa dirección fueron incrementados las últimas semanas en diferentes puntos del municipio.
Sobre los resultados de las estrategias dio cuenta el titular del despacho de Gobierno, Nicolás Otero, precisamente en instantes que cumplía una de las sesiones con las comunidades en el sector de Balmoral.
Explicó que punto fundamental de los trabajos consiste en organizar las comunidades de tal forma que estas se constituyan en pieza fundamental a la hora de prevenir toda clase de delitos, principalmente los robos.
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Las condiciones de Fusagasugá al respecto, no son particulares; encuadran en lo que viene ocurriendo en todo el país, especialmente en las ciudades más pobladas.
Fusagasugá tiene planes contra el hampa
Según advirtió Botero García, la ciudad tiene retos frente a los temas de seguridad. Su condición no se aparta de los recurrentes escenarios en muy buena parte del territorio nacional. “Nosotros bajo el liderazgo de nuestro alcalde, John Jairo Hortúa, definimos una línea estratégica en el tiempo”.
Precisamente, en julio pasado, dieron inicio a los Consejos de Seguridad con los cuales generaron compromisos de “lado y lado”, es decir de las autoridades y ciudadanía. Los ajustes de entonces ocurrieron en respuesta a los brotes de inseguridad que, en ese momento, hacían mella en la tranquilidad ciudadana.
“A partir de eso fue que creamos la estrategia de redoblar esfuerzos con el Comandante (Policía) del Departamento de Cundinamarca, a quien tuvimos en nuestra oficina en dos ocasiones. La pedimos (…) que nos hiciera un acompañamiento especial entendiendo que somos el segundo municipio más grande de Cundinamarca”.
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Después de Soacha, Fusagasugá es uno de los territorios con mayor población. A pesar de ello se ha mantenido por debajo de los habituales índices de delitos en el departamento.
Resultados acciones en agosto
El pasado mes (agosto), según reportes de la Secretaría de Gobierno, las autoridades lograron poner tras las rejas otras 8 personas con alguna clase de compromisos ante la justicia colombiana.
Motivados por el balance, las autoridades le subieron el tono a las tareas con las cuales pretenden frenar los hechos al margen de la Ley. Una de las acciones, a manos del alcalde Jairo Hortúa, consistió en acompañar los controles a los centros nocturnos del municipio.
Además y como producto de la embestida oficial, durante los primeros 15 días de septiembre las autoridades cobraron la detención de 21 individuos, todos ellos bajo condición de flagrancia. Otro seis cayeron por orden judicial; eran requeridos por hurto agravado, homicidio, violencia intrafamiliar y una persona que quiso sobornar a un Agente de Tránsito.
“Estamos redoblando los esfuerzos” dice Otero, para subrayar las sesiones con las comunidades mediante las cuales pretenden consolidar la unión de esfuerzos contra la delincuencia. Para ello, la Alcaldía y todos sus componentes fijaron esfuerzos en la consolidación de lo que llaman “binomio comunidades – autoridades”.
Los organismos comunales
Aspecto fundamental en el propósito por frenar el embate de los antisociales es la presencia y participación de los líderes comunales. Con ellos fueron programados ejercicios de capacitación. Con ello pretenden suministrarles los conocimientos y argumentos necesarios que haga efectiva su colaboración con las autoridades.
Precisamente, una de las tareas es lograr que numerosos ciudadanos “empiecen a hacer un curso en la Escuela Superior de Administración Pública. Durante el mes de octubre, los mejores 50 irán a hacer el diplomado en la Escuela de Policía”.
