Muerte del estilista Moisés Sandoval. Una audiencia verbal este martes (24 de septiembre) frenaría posibilidad de que el sindicado salga de la cárcel por vencimiento de términos.
Es real. La eventualidad de que el acusado deje la prisión llenó de incertidumbre, malestar y desconcierto sobre la aplicación de justicia por el crimen ocurrido el pasado 12 de diciembre. Ese día, el empresario fue asesinado dentro de uno de sus establecimientos en el sector de Balmoral, calle 17 de Fusagasugá, Cundinamarca.
Del escenario se enteró la opinión en publicaciones de varios medios alternativo de la región, entre ellos FusaOline, quienes dieron cuenta de lo que puede ocurrir si la administración de justicia no rectifica su camino.
Las posibles causas son múltiples. Varias hipótesis se encuentran sobre la mesa de análisis. Algunas, en mayor proporción, apuntan a la congestión que tradicionalmente ensombrece la administración de justicia colombiana.
Muerte del estilista Sandoval
Hoy, es difícil establecer las verdaderas causas de lo que se puede ser un caso más de impunidad sobre crímenes en el país. Noticias Día a Día pudo establecer que este martes, si nada extraordinario ocurre y se cumple una “audiencia de tipo oral” ya programada, el caso puede retomar el camino que le corresponde. Otra diligencia de similares características se encuentra programada para el viernes próximo (27 de septiembre).
Algunas hipótesis advierten tres posibles razones por las cuales el proceso no ha podido desarrollarse de manera adecuada. Se sabe que en algún momento del trámite del caso, se presentó un cambio de Juzgado lo cual descompuso la ruta que el expediente llevaba.
Ese aspecto pudo retrasar el trámite de las diligencias judiciales aunque, en la actualidad, nadie se atreve a asegurarlo; también puede ser una suma de motivos los que montaron el actual escenario.
Otra posible causa podría responder al exceso de expedientes en manos de los fiscales encargados del sistema acusatorio en Fusagasugá. Ello incluye, desde luego y en particular, el del caso de Sandoval Martínez.
Se sabe que es común el hecho de que algunos de ellos (fiscales) tengan programados varios casos “a la misma hora y el mismo día” pero en diferentes juzgados. Así, les resulta humanamente imposible poder atender sus responsabilidades dentro de la administración de justicia.
Un tercer eventual motivo hace mirar hacia el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario; han sido varios los casos en los cuales, por razones que casi nunca se explican, el INPEC no facilita la presencia de los acusados en las diligencias vía internet. Puede obedecer a razones técnicas, es decir, por fallas en la web. Algunas voces, incluso, se aventura a considerar motivos intencionales.
Se supo que este tipo de eventos, particularmente para el caso de Cundinamarca, se presentan con frecuencia desde la Cárcel del Diamante de Girardot.
Sin embargo y más allá de este debate, hoy existe la posibilidad de que el principal sospechoso del asesinato de Moisés Sandoval pueda quedar en libertad por vencimiento de términos.
El asesinato
Apenas comenzando la noche de ese martes 12 de diciembre pasado, hizo eco al crimen que acabó con la vida del reconocido estilista Moisés Sandoval. Sentado sobre una de las sillas dentro de su barbería recibió varios impactos de bala. Las heridas fueron mortales; acabaron con su vida poco después.
Testigos relataron que dos hombres llegaron en moto y, mientras uno de ellos, el conductor, se movía sobre la vía para facilitar el escape, su compinche materializaba el sangriento caso. La secuencia, en principio, hizo pensar que era un caso de robo frustrado. Días después y en la medida en que avanzan las investigaciones, las hipótesis cambiaron: efectivos de le Sijín se inclinaron en pesar que, en realidad, se trataba de un ajusticiamiento por encargo. Actualmente nada se sabe sobre la identidad el autor intelectual.
Las capturas
El trabajo investigativo fue contundente. Dos semanas después del asesinato, el martes 26 de diciembre, sus responsables fueron ubicados y detenidos. Los operativos permitieron la aprehensión de uno de ellos; el conductor de la moto, logró escapar. Alias "chimichurri", el parrillero y quien disparó contra Sandoval, fue detenido; también paso a manos de las autoridades una mujer quien les facilitó refugio mientras esquivaban la persecución de la Policía.
Con ellos dieron investigadores de la Sijín mediante trabajo emprendido minutos después del crimen. Revisaron las cámaras de seguridad a lo largo de las calles partiendo del lugar donde ocurrió el episodio de sangre. Así llegaron a una vivienda en la parte alta del barrio Pekín al oriente de Fusagasugá.
Hasta ahí todo iba bien. Sin embargo, días después, el caso en búsqueda de justicia comenzó a enredarse; no volvió a tenerse noticia del cómplice del homicidio; tampoco sr tuvo noticia sobre los resultados de las investigaciones en búsqueda de la persona detrás del crimen.
En la actualidad, el caso volvió a llamar la atención de la familia de la víctima y sus allegados quienes sienten temor de que el homicidio quede impune.