La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ha completado la entrega de 10 reservorios de aguas lluvias en los municipios de Beltrán, Jerusalén y Nariño, beneficiando a 322 familias en 25 municipios durante el último año. Esta acción es parte de un amplio proyecto que busca construir cinco mil nuevos reservorios para el año 2027.
CAR construye reservorios de agua en Cundinamarca
Las estructuras entregadas podrán almacenar hasta 120 metros cúbicos de agua, lo que permitirá enfrentar los desafíos de sequía y desabastecimiento de agua en estas zonas.
Este esfuerzo por parte de la CAR no es solo una solución inmediata, sino una estrategia integral que incluye educación ambiental y acuerdos de conservación. Además, se promueve la plantación de árboles en los terrenos de las familias beneficiadas para aumentar la sostenibilidad del proyecto.
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Actualmente, se avanza en la construcción de nuevos reservorios en otros municipios como Susa, Ubaté y Carmen de Carupa, con la meta de expandirse gradualmente a toda la región.
Leonidas Pedreros, un campesino del municipio de Jerusalén, expresó su alivio y gratitud por esta iniciativa. “Yo cultivo maíz y ahuyama y últimamente se me han perdido por falta de agua.
Ya con este reservorio podré sacar mis cultivos adelante”, comentó Pedreros, ilustrando el impacto positivo inmediato de esta acción en la vida de los agricultores locales.
Según la CAR, estos reservorios permiten la recolección de aguas lluvias durante la temporada invernal, para que luego puedan ser utilizadas en épocas de sequía.
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Este método no solo asegura el riego de los cultivos, sino que también permite la continuidad de actividades agrícolas y ganaderas fundamentales para la economía local.
Diego Guerrero, Líder del proyecto Sistemas de Almacenamiento y Gestión del Riesgo, destacó la importancia de esta implementación.
“La alta vulnerabilidad por desabastecimiento de agua en estos municipios hace que estos sistemas sean esenciales. Ahora, las familias campesinas pueden contar con un depósito de agua en su predio para la sostenibilidad agrícola y su seguridad alimentaria”, afirmó Guerrero.
Para contextualizar, es relevante mencionar que esta iniciativa se enmarca dentro de acciones más amplias de gestión del cambio climático.
La reducción de riesgos de vulnerabilidad social y ambiental es un objetivo clave de la CAR, y la construcción de reservorios es una medida concreta en este sentido.
Se busca no solo mitigar los efectos del cambio climático sino también adaptar las prácticas agrícolas y ganaderas locales para hacerlas más resilientes.
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La continuidad del proyecto prevé la evaluación técnica de nuevos municipios prioritarios, con el objetivo de abarcar el 100 % del territorio. Esta expansión permitirá abordar de manera más efectiva las problemáticas relacionadas con el acceso al agua en el departamento de Cundinamarca.
Este enfoque multifacético y sostenible refuerza la importancia de las acciones locales en la lucha contra el cambio climático. La construcción de reservorios representa un paso significativo hacia la adaptación y la mitigación de los efectos del clima en las comunidades rurales.
