Lo que existe es estar preparados para aprovechar las oportunidades.
No sé si eres de los que leen el Marmograma por las mañanas, en las tardes, en la casa, o lo lees luego en la oficina, pero hagamos un ejercicio.
Si ya estás en la oficina (o si ya saliste a la calle hoy), y te pregunto cuántos carros rojos viste hoy, ¿sabes la respuesta?
Muy probablemente no. Pero la próxima vez que salgas te vas a fijar, así sea por el ejercicio pendejo. Ahora, si te digo que te doy 10 USD por cada carro rojo que veas, SEGURO te vas a fijar. Y vas a estar pendiente hasta de los carros en las vallas publicitarias. Es que hasta los Transmilenio vas a contar (si estás en Bogotá, claro).
Pues eso mismo pasa en los negocios. De hecho pasa con todo en la vida. Es por eso que uno ve más ambulancias cuando tiene programada alguna cirugía.
Cuando empiezas a trabajar tu Marca Personal poco a poco empiezas a ver oportunidades en todo. Ves lo que publican en redes los demás y lo que te gusta lo guardas mentalmente en tu lista de “por copiar”, o lo que no te gusta en el cajón de “no hagas esto ni por el carajo”.
Estás en una conferencia y dices “eso lo podría hacer yo”.
¿Sabes qué te falta para dar una conferencia de esas? Prepararla y ofrecerla. Prepararte es la palabra clave. Claro, este ejemplo aplica si no has dado conferencias.
Pero si sí, te cambio el ejemplo. ¿Sabes qué te falta para dar más conferencias? Ofrecerlas.
Me pasó a mí, que me empezaron a llegar asesorías cuando empecé a ofrecer #LikeAPro. Antes no. Y lo triste es que yo pensaba que era porque nadie me iba a comprar. Pues resulta que sí. Y no solo me las compran sino que les gusta (que es el otro temor de los que podemos sufrir de Síndrome del Impostor, que somos el 90% de la humanidad).
Conclusión: Prepárate, empieza a estudiar, a leer, a interesarte por el tema, vas a ver cómo las oportunidades empiezan a llegar.
Como le pasó a Ana Karina, una de mis pupiletas. Por mencionarte un caso específico, que no sea el mío.
Cuando empezamos, uno de sus objetivos era educar al mundo sobre el Síndrome de Down, porque su hijo lo tiene. Ella padeció, o padece, las dificultades de tener el síndrome en nuestra sociedad. No es un mundo fácil.
El reto se veía muy grande, enorme. Y por eso mismo ella se frenaba. Fuimos atacando cada objetivo de a pocos, partiéndolos en objetivos más pequeños y, por último, en tareas ejecutables, lo más pequeñas posible.
Hoy, unos meses después, Ana Karina ha llegado incluso a hablar en el Concejo de Bogotá sobre el Síndrome de Down. Ha hecho conferencias, talleres, creó un podcast que escuchan en todo Latinoamérica.
En fin, ha logrado cosas que antes se veían súper distantes. Cosas que consideraba casi que imposibles.
Te voy a soltar la primera oportunidad de empezar a trabajar en tu Marca Personal. Para que la aproveches.
Si eres de esos que a veces se preocupa por su estabilidad laboral, por tu futuro económico, o eres de esos que quiere vivir más tranquilo…
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