En Ubaté, Cundinamarca, la Procuraduría General de la Nación investiga la muerte de dos menores de edad en el hospital local.
En la Empresa Social del Estado (ESE) Hospital El Salvador de Ubaté, Cundinamarca, se despliega una narrativa marcada por la gravedad y la complejidad.
Se trata de múltiples casos de fallecimientos de menores de edad ocurridos bajo la atención y supervisión del personal médico de esta institución de salud.
Esta situación ha generado una respuesta enérgica por parte de los familiares de 13 niños fallecidos, quienes el 28 de noviembre de 2023.
Estas personas se congregaron frente al Ministerio de Salud y Protección Social, alzando sus voces en busca de respuestas esclarecedoras y justicia ante estos trágicos decesos.
Procuraduría investiga en hospital de Ubaté, Cundinamarca
Las denuncias presentadas hasta el momento han puesto de manifiesto una lamentable dilación en las investigaciones lideradas por la Fiscalía General de la Nación.
Son los casos de menores fallecidos hace tres años que aún no han encontrado una respuesta clara respecto a las circunstancias de su muerte.
Este contexto ha dado lugar a un ambiente de malestar y desconfianza en la comunidad y entre los familiares de las víctimas.
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Ellos instan a una pronta y determinante respuesta de estos casos, así como a la transparencia en todo el proceso de investigación.
Ante este panorama, la Procuraduría General de la Nación (PGN) ha decidido intervenir, dando inicio a una indagación previa dirigida a funcionarios del hospital.
Las identidades de las personas involucradas aún se mantienen en reserva, en relación con los dos casos específicos de fallecimiento de menores.
La posible negligencia médica y administrativa
Esta investigación se centra en la posible negligencia médica y administrativa por parte del personal de la institución.
La inspección se centra especialmente en situaciones donde, según los informes preliminares, los menores se encontraban en buen estado de salud durante controles prenatales.
El proceso de la Procuraduría incluye la recopilación de pruebas y la convocatoria a los presuntos implicados para rendir declaración en versión libre.
Este enfoque tiene como objetivo arrojar luz sobre los eventos y determinar si se han cometido faltas disciplinarias, o si los funcionarios del hospital pueden ser exonerados de responsabilidad en estos episodios.
En abril de 2023, el Hospital El Salvador emitió un comunicado de prensa en respuesta a los fallecimientos de dos menores en sus instalaciones.
En dicho comunicado, expresaron sus condolencias a las familias afectadas y, al mismo tiempo, defendieron la actuación del personal asistencial, asegurando que se brindaron todas las atenciones necesarias.
A pesar de los esfuerzos desplegados, lamentablemente, no fue posible revertir la condición de salud de los niños.
En respuesta a las irregularidades detectadas, la Dirección de Inspección, Vigilancia y Control de la Secretaría de Salud de Cundinamarca realizó una visita técnica al hospital en abril de 2023.
Los hallazgos revelaron numerosos incumplimientos en diversos servicios, entre ellos 120 en cuidado básico neonatal, 312 en enfermería y 1.104 en transporte asistencial medicalizado.
Además, hay 744 en imágenes diagnósticas ionizantes, 356 en consultas de especialidad, 328 en medicina general, 334 en odontología general y 420 en vacunación en unidades móviles.
Frente a esto, la Secretaría de Salud de Cundinamarca anunció la ejecución de procesos administrativos para abordar y corregir las deficiencias identificadas en la prestación de servicios de este centro de salud.
La situación del Hospital El Salvador de Ubaté demanda una atención inmediata, y medidas eficaces y proactivas para garantizar la seguridad y calidad en la prestación de servicios de salud.
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La comunidad, los familiares afectados y los organismos de control aguardan respuestas claras, acciones correctivas efectivas y, sobre todo, justicia para las familias afectadas.
La transparencia y diligencia en la investigación son fundamentales para abordar adecuadamente este complejo escenario y restaurar la confianza en la institución hospitalaria.
En este proceso, la consideración de todas las perspectivas y la priorización del bienestar de los pacientes se presentan como imperativos irrenunciables.
